En la V Región, uno de los cultivos hortícolas mas importantes es el tomate, pero también el mas afectado por diversas enfermedades debido a su condición de monocultivo. Una de las enfermedades mas importantes por su impacto económico es cancro bacteriano del tomate (Clavibacter michiganensis subsp. michiganensis). El uso de microorganismos como potenciales herramientas de control de enfermedades de las plantas ha estado desarrollándose desde hace algún tiempo en diferentes regiones agrícolas del mundo. Sin embargo, son pocos los esfuerzos que se han llevado a cabo para encontrar controladores biológicos de esta enfermedad. Ademas, su efectividad ha sido probada en orden de reducir poblaciones del patógeno a nivel de suelo. En este estudio, se logro aislar distintos microorganismos desde la superficie de plantas de tomate (hojas, heridas, hidatodos) provenientes de diversos predios comerciales de la provincia de Quillota, V Región, con capacidad antagónica sobre C. m. michiganensis bajo condiciones de laboratorio, obteniéndose 12 cepas bacterianas del genero Pseudomonas. De estos aislados, se seleccionaron y evaluaron 6 cepas: Ps11, Ps45, Ps60, Ps69, Ps76 y Ps79. En condiciones de invernadero frío, se encontró que las bacterias eran capaces de disminuir de manera significativa (p < 0.05) la incidencia (cepa Ps69) y el indice de daño de la enfermedad (cepas Ps60, Ps69, Ps79). Este efecto fue similar al observado con el tratamiento químico por lo que estas bacterias podrían ser una herramienta efectiva de control biológico de la enfermedad a nivel del filoplano de las plantas de tomate para consumo fresco bajo condiciones de invernadero frío.