Los tensioinfiltrometros han alcanzado una creciente popularidad en la determinación in situ de propiedades hidráulicas de los suelos. Ellos han sido diseñados para medir infiltración a una presión de agua controlada dentro de una interfase circular en la superficie del suelo. Esta técnica fue ocupada para caracterizar la velocidad de infiltración estabilizada, sorptividad, conductividad hidráulica no saturada y tamaño representativo de poros, en suelos aluviales de la zona central de Chile, acondicionados durante dos años con dos tipos de enmiendas orgánicas: bioabono (material estabilizado por biodigestión) y estiércol de bovino (sin tratar). Se realizaron 2 ensayos (N, aplicación un año; S, aplicación dos años seguidos), con cuatro tratamientos cada uno: T0 (testigo), B/4 (suelo: bioabono, 3:1), B/2 (suelo: bioabono, 1:1) y E/2 (suelo: estiércol, 1:1). Si bien solo se observan tendencias en el mejoramiento de las características de infiltración en los tratamientos con materiales orgánicos, no se advierten diferencias estadísticamente significativas (Alfa=0,05) entre tratamientos (dosis de acondicionador y tiempo de aplicación)