La determinación de la dosis adecuada de fertilizante nitrogenado en viñedos para la producción de vinos de alta calidad es un objetivo de gran importancia en el manejo de los viñedos. La deficiencia de nitrógeno (N) produce un pobre crecimiento, un bajo rendimiento y problemas en la fermentación de los mostos. Un exceso de este fertilizante por el contrario puede significar un estimulo exagerado al crecimiento vegetativo lo cual puede producir indirectamente un excesivo desarrollo del follaje y un sombre amiento excesivo. Esta demostrado que esta situación a su vez origina problemas de baja productividad y mala calidad de la uva.; contribuye a tener una mayor susceptibilidad a enfermedades fungosas como botritis y oídium; a la contaminación del agua en el suelo (agua freática) y de la atmosfera como resultado del acarreo, la lixiviación, y la desnitrificación. Es necesario tener en consideración que, comparativamente, la vid es una especie de bajos requerimientos nutricionales, tal vez por ser muy eficiente en la absorción y asimilación de ellos: por disponer de un buen sistema radicular que es capaz de explorar y minar un gran volumen de suelo. Tiene además, la posibilidad de obtener N durante una temporada de crecimiento prolongada (6-8 meses en Chile) (Pérez Harvey, J., 1993). El desafío en consecuencia, es saber que nivel de N debe tener o disponer la planta para producir eficientemente uva y vino de buena calidad con el mínimo de costo y sin contaminar el ambiente.