Sepúlveda S., FabiolaCarrasco J., Jorge (eds.)2020-12-152020-12-152014https://hdl.handle.net/20.500.14001/7755El Valle de Azapa, en la Región de Arica y Parinacota posee 3.000 ha cultivables, de las cuales 840 ha corresponden a la producción de tomate. Los suelos de esta zona contienen un bajo porcentaje de materia orgánica y nutrientes, lo cual se ha traducido en bajas notables en los rendimientos. Además, el ataque constante de nemátodos y hongos fitoparásitos ha contribuido a que la baja de rendimientos sea aún más severa, sobre un 50%, debido a que el daño ejercido por estos organismos se caracteriza por la destrucción continúa de raíces, lo cual restringe la absorción de agua, nutrientes y el balance hormonal de la planta. Por esta razón, los agricultores se han visto en la necesidad de utilizar fumigantes de suelos como el Bromuro de Metilo, fumigante en retirada debido a que es altamente tóxico y de amplio espectro. Por mucho tiempo, este se constituyó en un insumo vital para la agricultura nacional. Su empleo en la esterilización de suelos y sustratos facilitó la obtención de alimentos y de mejores ingresos para los productores agrícolas. Sin embargo, se ha demostrado que la liberación de este gas a la atmósfera tiene un efecto ambiental muy negativo, pues su utilización debilita la "capa de ozono", provocando con ello consecuencias potenciales muy negativas sobre el ambiente y el cambio climático mundial.EL-34Validación de alternativas al bromuro de metilo como desinfectante de suelo en el Valle de AzapaBoletínhortalizasdesinfeccion del suelofumigacionbromuro de metilopesticidassolarizacion del suelovapor de aguaesterilizacion