Díaz Z., FernandoGil S., Gonzalo2020-12-292020-12-29Jul-Sep 19https://hdl.handle.net/20.500.14001/55286Se realizó un estudio sobre cuaja y desarrollo de frutos de tuna en Pudahuel, Área Metropolitana, dividido en tres partes de diferente objetivo. En el primer trabajo se estudió el efecto de aspersiones de ácido giberélico (AG3) sobre flores emasculadas. Se logró obtener frutos partenocárpicos de tamaño normal con una aspersión en antesis de AG3 en dosis de 500 ppm o con tres aspersiones de 100 ppm en antesis, 22 y 42 días después de la antesis (DDA). Mayor tamaño aún resultó con dosis de 500 ppm en esas tres épocas. En el segundo trabajo se compararon algunos métodos de aplicación del AG3. La pasta de lanolina con 1% de AG3 dio excelente resultado en el tamaño final y en el desarrollo del endocarpio. La inyección a la cavidad ovárica fue también un método positivo y muy eficiente porque basto 1 cc de AG3 para estimular un crecimiento normal. Los frutos partenocárpicos resultaron siempre con falsas semillas formadas por integumentos ovulares desarrollados. En la tercera parte se estudió el efecto de aspersiones de AG3 en flores antes de la antesis y en frutos sumillados en desarrollo. No se logró cuajar absolutamente partenocárpica sin emasculación, aunque se redujo el número de semillas con el AG3 preantesis. Las tunas cuajadas libremente contenían pocas semillas (déficit natural) y cuando recibieron AG3 en dosis de 500 ppm a los 22 y 42 DDA crecieron significativamente más. El AG3 produjo, en general, alargamiento de frutos y disminución de los sólidos solubles. Retraso, además, la degradación del color superficial cuando se asperjo frutos partenocárpicos 42 DDA.Artículotunapartenocarpiareguladores de crecimientoacido giberelico